
La familia de Humberto Orato Gavino, oriunda de Puebla fue de las primeras que empezó a cortar, a labrar y comercializar la piedra de cantera en Ecatzingo hace más de 60 años.
Entrevistado por la reportera de AMAQUEME, contó que él aprendió el oficio cuando tenía diez años y empezó a ayudar a su abuelo cortando piedra volcánica en el monte en su comunidad de origen, El Salado, Puebla, localizada en una zona montañosa.
Externó que su abuelo Andrés Orato le enseñó técnicas y secretos para cortar y labrar, permaneciendo con él hasta los 17 años, cuando estuvo listo para hacerlo solo y por su cuenta.
“Empecé labrando fachadas de iglesias y de casas particulares, recorrí varios estados y ciudades de la república como Zamora, Michoacán, Jalapa y Córdoba Veracruz, la Ciudad de México”, indicó.