OZUMBA, Méx.- Padres de la secundaria Josefa Ortiz de Domínguez, dañada por el sismo, compraron carpas para que sus hijos reiniciaran clases, por la tardanza del gobierno estatal para arreglarla.
A partir del siete y el ocho de noviembre, alrededor de 700 alumnos de ambos turnos volvieron a las aulas, utilizando 15 carpas, pues preocupados por el tiempo que tardaría en llegar material para la reconstrucción, los paterfamilias se organizaron.
A base de cooperaciones voluntarias y faenas de limpieza en el área donde se instalarían las carpas, se adquirieron 15, porque del sismo del 19 de septiembre, causó fracturas a 11 salones, la biblioteca, el laboratorio, talleres y la bodega.
Pese que había la recomendación de las autoridades educativas de esperar a contar con el dictamen de seguridad estructural por parte de la Instituto
