13 de marzo
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Mónica Martínez Rivera

    ATLAUTLA, Méx.-  Luis Madariaga Flores es productor de nuez de castilla que ha mejorado su fruta al paso de los años y actualmente sus nogales producen cinco clases de nuez diferentes.

    El rancho de don Juventino Madariaga tiene 500 nogales, cuya cosecha anual es cortada a principios de julio y luego vendida en el tianguis de Ozumba.

   Sus principales clientes acuden hasta la huerta a comprar la nuez, principalmente de Puebla y de la Ciudad de México, que a su vez distribuyen en otros estados de la república.

    Entrevistado por AMAQUEME, explicó que la temporada de la nuez inicia a partir del 29 de junio y concluye a principios de agosto, momento exacto cuando está lista para ser cortada, pues es su mejor momento por la calidad y sabor.

    “La cosecha inicia preparando escaleras, botes y costales que usarán los peones para sacudir los árboles, posteriormente se contratan alrededor de 70 trabajadores, entre hombres y mujeres, los primeros son quienes se suben a cortar la nuez que van colocando en sus botes y sacuden el nogal”, detalló.

   Dijo que la nuez que cae al suelo es recogida por las mujeres para echarla en los costales, una vez que se llenan, la tienden en una bodega, donde hay una cama de zacate, ahí se vacía se le esparce cal y se deja reposar entre ocho y quince días para que la cáscara se abra.

    Indicó que cuando ya está lista para pelar, varias mujeres la limpian y después seleccionan en cinco clases, la extra grande que su precio por ciento  cuesta 280 pesos, la de primera que es la grande, la cual cuesta 260 pesos, la de segunda que es la mediana y se vende en 200 pesos.

   “La de cuarta que es la chica y vale de 160 a 100 pesos, y la de quinta, conocida como la canica, de 100 pesos”, informó el entrevistado.

   Resaltó que también vende la nuez morena, llamada así porque el granizo golpeó la cáscara, manchándola de negro y su precio varía de 60 a 100 pesos el ciento, dependiendo la calidad y tamaño.

   “También la oferto limpia, el kilo cuesta 700 pesos”, comentó. 

    El productor señaló que su experiencia en mejorar la fruta inició con su abuelo Juventino, posteriormente pasó a su papá y ahora le toca a él junto con su hermano, quienes además de nueces, siembran durazno, capulín, chilacayotes y hierbas medicinales.