Mónica Martínez Rivera
OZUMBA, Méx.- En muy poco tiempo y con méritos propios, la doctora Marisol Ruiz Enríquez se ha ganado el reconocimiento de la población porque ha curado a personas con probable COVID-19.
La recomendación de boca a boca de los pacientes que ha atendido y se han aliviado con ella de su mal, ha sido su mejor publicidad, al grado que la buscan de Estados Unidos, y los atiende a través de video llamadas.
Su fama ya traspasó la región y durante las semanas recientes, en forma frecuente llegan a su clínica personas de Puebla, Querétaro y Tijuana.
La doctora atiende en la calle Bartolomé de las Casas, donde diariamente se satura la sala de espera, al grado que sus pacientes tienen que hacer fila en la calle.
Entrevistada por AMAQUEME, dijo que diariamente atiende a un promedio de 120 personas que empiezan a buscarla desde las seis de la mañana y termina de dar consultas a las 21 horas.
Reveló que el tratamiento incluye medicamentos antivirales, antibióticos, desinflamatorios e inmunomodulador, pero también recomienda a quienes recurren a sus servicios, la oración.
“Son las bases más importante para salir de esta enfermedad, pues se necesita tener fe, pues el COVID no te mata, lo que te mata es el miedo”; aseveró la facultativa.
Confió a la reportera que ya tuvo coronavirus, al igual que sus colaboradores, y explicó que a partir de su experiencia aprendió a identificar los síntomas que pueden ser un dolor en de estómago, diarrea, presión arterial baja o alta, dolor de cabeza, desmayos y convulsiones.
“Sumado al nivel de oxigenación y la frecuencia cardíaca son probables infectados, pero la radiografía de tórax que les pido realizarse, permite determinar el daño y con saber que están contagiados, aunque no se cuente con una prueba de laboratorio”, indicó.
Invitó a la comunidad en general a no sacar a los niños a la calle, principalmente a lugares donde haya aglomeraciones, pues, afirmó que desde abril a la fecha ha atendido ocho casos, desde un mes de nacido hasta de doce años.
Junto con ella, también atienden Lucía López Villarreal y María del Pilar Castro Rocha, apoyados de los asistentes Silvia Águilar Castillo y José Cruz Solano Sánchez.
