13 de marzo
c58a48a4-601a-4194-9b5a-01d57010a42d

Jorge Martínez Cordero

    SAN MARTÍN CUAUTLALPAN, Méx.- Pedro Rayón, de 35 años, quien estudió  ingeniería bioquímica concretó un proyecto personal de ayudar en su economía y alimentación a vecinos de su pueblo, para lo cual construyó un invernadero de jitomate orgánico.

   Lo hizo con ayuda de su amigo y socio Adrián Reyes.

    AMAQUEME lo entrevistó en su lugar de trabajo y explicó que el invernadero ocupa una extensión de mil 200 metros cuadrados en terrenos de su familia y también contó con el consentimiento y apoyo de sus tíos.

   Apuntó que en un predio contiguo de 400 metros se sembraron ocho árboles de limón y cebolla también orgánicos.

    “Los 17 surcos o camas que resultaron del terreno se destinarán para tres mil 500 plantas de jitomate las cuales serán regadas por un sistema de goteo, donde se utilizarán mil 428 metros de manguera especial, en tanto los surcos serán protegidos por un acolchado plástico para evitar que el agua se riegue y genere el crecimiento de mala hierba”, informó.

   El sábado ocho de agosto, junto con su amigo, compañero de carrera y sueños, inauguraron su proyecto, conocido como Jagüey productos orgánicos.

   Dijo que tienen la intención de producir el alimento orgánico, en primera instancia para la comunidad a un precio accesible, a la vez que con el mismo proyecto se crearon fuentes de empleo para los vecinos de San Martín, comenzando de esa manera a ayudar a su gente, esperando pronto puedan brindar más trabajo.   

   El entrevistado señaló que el proyecto quedó registrado a partir del presente año en la UAEM campus Valle de Chalco como incubadora de empresas.

    “Jagüey no solamente es un proyecto agrícola, también es social, ya que se han creado fuentes de trabajo de manera directa para cinco o seis personas, con lo que cinco familias de San Martín están teniendo ingresos económicos”, precisó por su parte Adrián Reyes.

    Los creadores del invernadero dijeron aproximadamente en dos meses y medio, la población tendrá en sus manos la primera producción del jitomate 100 por ciento orgánico, el cual no será tocado por ningún químico.

    Por último Pedro Rayón dijo que el objetivo del proyecto Jagüey productos orgánicos es lograr que su producción se consuma en San Martín para alimentar a su población para posteriormente, con el tiempo tomar las respectivas decisiones para las siguientes cosechas, no sólo del jitomate, sino del limón y de cebolla.