
CHALCO, Méx.- Bajo el frío, la lluvia y el sol permanecen hasta por nueve horas derechohabientes del ISSSTE en espera de conseguir una ficha para consulta, lo que no siempre obtienen.
Y cuando sí tienen la fortuna, la consulta no dura más de diez minutos, por la acumulación de trabajo de la escasa plantilla médica que atiende.
Justamente para evitar perder tiempo y tener la oportunidad de conseguir una ficha, la mayoría de los pacientes, en su mayoría adultos mayores empiezan a formarse a partir de las tres de la mañana.
La clínica se encuentra en la calle María Félix y Cinco de Febrero, de la colonia “La Bomba” y ahí se mantienen decenas de personas formando una larga fila, esperando pacientemente, si corren con suerte, el pase para ser atendidos en una consulta literalmente exprés, como ellos la califican.
Derecho habientes entrevistados por AMAQUEME, denunciaron la insensibilidad de directivos de la clínica para brindar una mejor atención, a lo que se suman tratos despóticos de guardias de seguridad que no les permiten resguardarse en el interior del inmueble cuando llueve o el frío y el son más intensos en determinadas horas.
A esta clínica asisten asegurados de Valle de Chalco, Ixtapaluca, Los Reyes, Chimalhuacán y otros municipios cercanos.
De igual forma, aseguraron que en forma cotidiana carece de medicamentos básicos como insulina.
Adrián Cortés, tiene 64 años, vive en Ixtapaluca, está enfermo de hipertensión y diabetes.
Afirmó que ha acudido varias ocasiones a la clínica en busca de su insulina y otros medicamentos, al igual que a su esposa, pero no han tenido suerte.
Calificó de pésimo e inhumana la atención que reciben.
“Si una receta que tiene una vigencia de 15 días se vence y no hubo el medicamento, tenemos que volver a presentarnos para sacar ficha y hacer que el médico nos vuelva a recetar el medicamento que no consiguieron”, señaló.
Por su parte, en tono verdaderamente molesto, Ángel López de 84 años, reveló que tenía una semana acudiendo diario por un medicamento, “y por una cosa u otra me regresan y hoy me manden a la chingada porque no hay, me dijeron que me presente hasta el 18 de septiembre a ver si llegan, ya estoy hasta la madre”.
Las anomalías e inconformidades son muchas, pero tanto Adrián como Ángel, confiaron en que su denuncia pública tenga eco en las autoridades correspondientes para que intervengan y hagan algo.