
Jorge Martínez Cordero
CHALCO, Méx.- Directivos del Centro Especializado en el Tratamiento de Adicciones y Trastornos Mentales “Paradox” desmintieron el empleo de castigos corporales para ayudar a sanar a sus pacientes.
Ubicado en calle Ignacio Allende 14 de la colonia San Francisco, el centro abrió sus puertas a AMAQUEME para permitir ver sus programas de trabajo, convivencia y sesiones terapéuticas, para demostrar que no oculta nada y mucho menos recurre a la fuerza física con los usuarios.
Lo anterior, luego de que este medio informativo publicara una denuncia de familias de internos que eran objeto de castigos físicos y maltratos sicológicos como correctivos.
El reportero acudió sin cita previa a las instalaciones para corroborar lo denunciado y fue recibido sin ningún problema.
El centro atiende una treintena de pacientes de los 14 hasta 30 años, cuatro de ellos mujeres, y el reportero entrevistó a varios de ellos por separado, coincidiendo en afirmar que nadie ha recibido malos tratos, discriminación o algo parecido en sus 30, 60 o 90 días que llevan de recuperación.
El señalamiento de violencia, lo atribuyeron a un paciente que ingresó al centro, el martes 15 de septiembre y se golpeó el sábado tres de octubre con otra persona más, que le ocasionó marcas de hematomas en el cuerpo.
Sin embargo, Jorge Adán Pacheco Alcalá, director de clínica explicó en entrevista que el joven en cuestión llegó con antecedentes de ser de extrema violencia.
Explicó que cuando fue presentado en las instalaciones, llegó esposado por la policía municipal por haber tenido altercados familiares.
El directivo puntualizó que el lugar, con casi siete meses de funcionamiento está debidamente acondicionado y a todos sus pacientes se les brinda un trato digno, a través de psicólogos, enfermeras y un médico, todos debidamente acreditados con cédula profesional que avala su especialidad.
Adán Pacheco, director del centro acreditó su licenciatura y especialidad en sicología con el número de cédula 11074472,
“Todo está en regla y estamos bajo la ley, es algo que nos diferencia de los conocidos anexos, lugares donde sí existen los castigos corporales y sicológicos” apuntó el titular.
El director dijo tener pruebas de que la información para desprestigiar a la clínica fue planeada, ya que la tarde del sábado tres, dos pacientes iniciaron una discusión que por la noche se convirtió en una pelea física.
Reconoció que efectivamente terminaron con golpes, pero sus familias reclamaron que habían sido golpeados por personal del lugar.
“No hay forma de que eso pasara, ya que la pelea quedó grabada en video por el circuito cerrado del centro, donde se aprecia que los demás pacientes intervienen para separar a los rijosos”, apunto Adán.
Aseveró que lo anterior fue una situación incómoda porque a toda costa han tratado de desprestigiar al centro, a tal grado, que familiares de uno de los denunciantes exigió el reembolso del dinero aportado y una cantidad extra.