
Mónica Martínez Rivera
SANTIAGO MAMALHUAZUCA, Méx.- Fernanda Méndez Avendaño y Oscar Torres Rivera son pioneros en la producción de lechuga hidróponica en la región oriente, cuya siembra no requiere tierra para cultivarse y su sabor y calidad son mejores.
Con ese propósito crearon el proyecto «hidrovegetales RIAVE y lo que siembran lo venden en línea.
Entrevistados por AMAQUEME explicaron que el cultivo en hidroponia es una técnica en la que se utiliza agua, algas marinas y sales minerales, y no requiere sembrarse en el suelo ni echarle tierra.
Dijeron el proceso dura ocho semanas para poder cosechar las lechugas y también siembran brócoli, acelgas, arubula, col rizada o Kale, espinaca y albahacar, aunque a partir de enero planean tener fresa.
Producen diferentes variedades de lechugas como la italiana y sangría, la hoja de roble, escarola y orejona mini.
“Su sabor es dulce, crocante, no necesita desinfectarse y se consume el 95% de la planta, porque tarda hasta dos semanas en buenas condiciones sin echarse a perder, debido a que son producidas de manera orgánica porque no se usan pesticidas y no hay contacto con el suelo”, detallaron.
Oscar es estudiante de ingeniería petrolera y Fernanda licenciada en relaciones comerciales.
Él aprendió a sembrar con esta técnica en el 2016, la cual ya perfeccionó y ella se encarga de venderlas en línea.
La pareja de emprendedores, de 24 y 23 años, indicaron que desde hace tres años comercializan sus productos, principalmente en restaurantes de la Ciudad de México, pero con la pandemia cerraron varios establecimientos y ahora están vendiendo en la zona oriente y en el estado de Morelos.
“Cada lechuga tiene un costo de 15 pesos para el consumidor final, misma que entregan los lunes y viernes a domicilio, aunque para los restaurantes la ofertan a 25 pesos el kilo.
Externaron que esperan convertirse en una granja orgánica con productos que no tengan químicos.