
Jorge Martínez
SAN ANDRÉS METLA, Méx.- Policías de Cocotitlán se aprovechan del número de clientes que los fines de semana acuden a bares y cervecerías de la zona restaurantera para extorsionarlos con diferentes cantidades.
Con ese único propósito instalan un retén en una desviación previa a dicho lugar.
El pasado 30 de enero, José Quintero y su novia Andrea García, fueron víctimas de los corruptos uniformados.
AMAQUEME supo su historia porque la publicaron en las redes sociales para denunciar a los policías.
Ellos son oriundos de Los Reyes la Paz.
Entrevistados por el reportero, informaron que por recomendación de un amigo visitaron San Andrés la noche del sábado 30 de enero, pero nunca esperaron tener que pagar prácticamente el cover a policías municipales que montan un retén casi medio kilómetro atrás.
La pareja denunció a AMAQUEME que al llegar a la desviación que conduce al punto referido, justo antes de subir el puente vehicular de la carretera federal México-Cuautla se toparon con patrullas de la policía.
Los efectivos policiacos se paran sobre la lateral de la carretera, donde necesariamente se tiene que ingresar a San Andrés, un punto sin alumbrado que es aprovechado por ellos con ese único propósito.
“Nos marcaron el alto con el argumento de verificar el estado en que conducía y con la intensión de revisar nuestro vehículo, como no pusimos resistencia y aceptamos, nos dijeron directamente que les diéramos para el refresco para dejarnos pasar”, aseveró José.
Dijo estar seguro que eran policías municipales de Cocotitlán, ya que así lo indicaban las dos patrullas que estaban estacionadas a la orilla de la carretera, alcanzando a ver entre ocho y diez uniformados.
Mencionó que en el momento que ellos fueron detenidos, adelante de ellos había una fila de cinco automóviles más esperando pasar.
“El gusto por disfrutar un momento agradable se convirtió en un trago amargo, porque ya no pudimos hacerlo al cien por ciento, pues gasté mil 500 pesos, incluídos la extorsión que les pagué”, denunció el entrevistado.
La pareja de novios lamentó la mala imagen y conducta corrupta de quienes se supone deberían de proporcionar seguridad, pero en lugar de ello se dedican a extorsionar.