SANTIAGO CUAUHTENCO, Méx.- Pobladores descubrieron a operarios de la CFE cortando la luz a una cartonera, reteniéndolos cerca de dos horas, tiempo durante el que los amenazaron con linchar y tuvieron que se liberados por la policía municipal.
Asimismo, cuando se retiraron, escoltados por policías municipales, les impidieron llevarse un camión y una camioneta.
Ello sucedió la mañana del jueves ocho sobre la calle 16 de Septiembre en perjuicio de la fábrica propiedad de Alejandro Galindo.
Vecinos entrevistados revelaron a AMAQUEME que un trabajador se dio cuenta del hecho y dio la alerta a personal de la cartonera y a la comunidad en general.
“Los descubrieron cuando cortaban el candado que asegura una reja donde está el medidor para sacarlo, pero ya no les dio tiempo, porque llegaron varias personas en camionetas y corriendo”, detallaron.
Aseguraron que al mismo tiempo, otras subieron a la torre de la iglesia para tocar las campanas y llamar a más pobladores.
Informaron que cuando fueron interrogados, los de la Comisión Federal de Electricidad les argumentaron que cortaron la energía eléctrica por un adeudo de la cartonera con la empresa, cuyo monto no les dieron a conocer.
Aseguraron los denunciantes que en breves minutos los cuatro operarios fueron rodeados por cerca de 30 vecinos, al igual que las dos unidades en las que llegaron a la calle indicada.
Afirmaron que la situación amenazó con salirse de control, por la forma como respondieron a las preguntas que les hicieron, amenazándolos con linchar, lo cual finalmente no sucedió.
Los entrevistados señalaron que más tarde arribaron dos licenciadas de la CFE para intermediar e informar con precisión los motivos que obligaron la suspensión del servicio.
Presente en el lugar, el dueño de la fábrica cartonera, Alejandro Galindo les informó que desde el año pasado demandó a la CFE ante la PROFECO y no ha emitido a la fecha ninguna resolución, calificando de ilegal el corte de energía.
Transcurridas más de dos horas, los trabajadores de dicha empresa se retiraron, pero los vecinos impidieron que se llevaran sus dos unidades en las que llegaron, que quedaron retenidas en la misma calle.
Advirtieron a la CFE que no las van a liberar hasta que no reconectaran el servicio.
