
CHALCO, Méx.- Durante dos horas fue cerrada al tráfico vehicular la avenida Solidaridad por vecinos cuyas casas se inundaron por el fuerte aguacero registrado la noche del lunes 17.
El grupo de inconformes vive en la colonia Culturas de México, la más perjudicada en este municipio.
Con el cierre de dicha arteria, exigieron al gobierno local su ayuda para sacar el agua de las casas y calles, hacer un censo de las pérdidas económicas para respaldar a las familias que perdieron parte de su patrimonio.
Dicho fenómeno natural, que por cuarta vez se registró en días recientes, la colonia Culturas de México continuó siendo la que más afectaciones tuvo, con decenas de casas inundadas.
Desde las 11 de la mañana, cansados de ser ignorados, como medida de presión hacia la administración, los pobladores decidieron tomar la calzada conocida también como Tejones, que liberaron más allá del medio día.
Lo hicieron cuando vieron que el gobierno mandó camiones Vactor y trabajadores del ODAPAS para sacar el agua de varias calles con el propósito de descender el nivel que llegó a 60 centímetros en algunas de las casas.
Con cartulinas en mano los inconformes demandaron a gritos la presencia de autoridades municipales en sus calles.
Finalmente, pasado el medio día llegó ayuda para iniciarse los trabajos en avenidas y viviendas.
“Sabemos que al realizar este tipo de acciones afectamos a terceros, pero lamentablemente es la única manera de hacer entender al gobierno para que mande la ayuda”, afirmaron vecinos.
Aseveraron que en menos de una semana son ya cuatro veces que el agua se mete sus casas por las fuertes lluvias, lo que se podría evitar si la responsabilidad existiera en alguno de los presidentes.
Dijeron que en lugar de estar haciendo techumbres y remodelando calles, deberían priorizar el drenaje o alguna planta de rebombeo que ayude a evitar este tipo de males que por muchos años ha sido el principal problema de la colonia Culturas de México.
Por último, Ana Lilia Carrillo, vecina de la calle Yaquis informó que con la lluvia de la noche del lunes 17, que duro poco más de una hora, bastó para que el agua que inundó su casa llegara hasta casi los 70 centímetros, dañando sus muebles y ocasionándole una pérdida de casi 20 mil pesos.