
SAN ANDRES METLA, Méx.- Cinco personas fueron baleadas por tres sujetos por una discusión generada por la injerencia bebidas alcohólicas la tarde noche del domingo cinco de septiembre.
Dos resultaron muertos, tres más terminaron con heridas graves que requirieron su hospitalización.
Los fallecidos eran hermanos, un joven de 17, el otro de 28 años, quienes recibieron los impactos en el tórax y estómago, perdiendo la vida en minutos a pesar de haber recibido los primeros auxilios.
Los tres restantes fueron trasladados con urgencia a dos hospitales de la región para su atención, debido a la gravedad de sus heridas.
Los hechos se desarrollaron poco después de las 19:00 horas en uno de los locales con venta de alcohol con razón social “Los dos amigos”, ubicado al pie de la carretera México-Cuautla de la zona restaurantera de esta comunidad, perteneciente a Cocotitlán.
De acuerdo a las primeras indagaciones de la policía, la discusión se dio al interior del negocio entre los clientes de dos mesas por motivos desconocidos, cuando las personas involucradas se encontraban ya bebidas.
Oficiales entrevistados por AMAQUEME precisaron que la gresca no pasó a mayores en ese momento y los agresores se retiraron del lugar, pensando los que se quedaron que todo había terminado en una simple discusión.
Sin embargo, indicaron que minutos después salieron del local y cuando lo hacían fueron recibidos a balazos, quedando los cuerpos tirados muy cerca de una gasolinera. Los tres agresores aprovecharon la confusión y descontrol de los clientes para escapar corriendo del lugar con dirección desconocida.
José Luis, conductor de transporte público comentó a AMAQUEME que se dirigía hacía Amecameca en el momento de la balacera y dijo que apenas si le dio tiempo de acelerar cuando escuchó los disparos.
“Sólo alcancé a ver que los cuerpos estaban tirados y no quise exponerme ni tampoco al pasaje”, aseveró el conductor. Por su parte vecinos de San Andrés dijeron que están cansados de los problemas que se generan cada fin de semana en la zona, debido al exceso en el consumo de bebidas embriagantes, exigiendo al gobierno municipal regularizar su venta o prohíbirla.