
Alma Abilene Figueroa López
ATLAUTLA, Méx.- Pedro Díaz Hernández, perdió la vista de uno de sus ojos, lo cual no es una limitante para en sentido real, hacer milagros con sus manos.
AMAQUEME lo entrevistó en el espacio donde diariamente es visitado por su numerosa clientela.
Recordó que aún era adolescente cuando aprendió a curar torceduras y a sobar huesos enseñado por su abuela paterna, doña Prisciliana Díaz.
Afirmó que considera un don con el que nació y empezó a sobar a los 17 años.
Dijo que no tuvo oportunidad de estudiar y se dedicó a trabajar como chofer y posteriormente se metió de lleno al oficio de huesero, actividad en la que es considerado como el mejor en la región.
Don Pedro explicó que ha curado diferentes tipos de lesiones, desde una torcedura hasta un hueso roto y atiende desde recién nacidos hasta adultos de la tercera edad.
“Hace como dos meses me trajeron a un niño de un año de edad que se cayó de la cama y se fracturó la clavícula, lo estuve atendiendo en varias sesiones y salió adelante”, informó.
Puntualizó que pese a que perdió la vista en uno de sus ojos, aún puede desempeñar su oficio, pues con sólo tocar la lesión sabe lo qué tiene que hacer.
“Tuve el caso de un joven que se le chispó el hueso del hombro, venía bastante lastimado, pero en tres sesiones lo curamos, como él han venido muchas personas, los más frecuentes son lesiones en la columna y costillas”, comentó.
Refirió que a su casa llegan buscando sus servicios personas de diferentes lugares aledaños a Atlautla, que ya lo conocen y lo recomiendan por su trabajo.
“Me apodaron “el manos milagrosas”, porque sin tener estudios he atendido a personas que en hospitales han sido rechazadas por lo grave de sus lesiones, hace tiempo me ofrecieron trabajar en un hospital de Toluca pero rechacé la oferta porque aquí mi gente me necesita”, aseguró don Pedro.
El entrevistado hizo una demostración a la reportera de su trabajo, utilizando un instrumento, cuyo nombre no recuerda, con el que succiona los huesos y los reacomoda, que sostuvo, es mejor que las ventosas.
“Este aparato funciona principalmente para la columna y las costillas, es maravilloso, pocas personas trabajan con él y yo lo conseguí hace muchos años”, afirmó.
Finalmente invitó a la población regional a conocer su trabajo, que también comprende la elaboración de remedios naturales para curar riñones, gastritis, diabetes y otras enfermedades.
A quienes se interesen por sus servicios, deben concretar una cita a los teléfonos 5545733473 y 5541769199.