12 de marzo
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    COCOTITLAN, Méx.- Inspectores de Regulación Sanitaria región Chalco colocaron sellos de suspensión en la asfaltadora EMULMEX S.A de C.V., por falta de documentación oficial para operar.

   Concretamente porque carecía del visto bueno del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).

   Esto sucedió la tarde del martes 16 de noviembre, cinco días después que el gobierno municipal colocara sellos de suspensión.

    La intervención de Regulación Sanitaria obedeció a constantes denuncias y quejas de pobladores que viven cerca de la planta, por las frecuentes afectaciones en su salud que causaba su funcionamiento, debido a la constante expulsión de gases tóxicos.

   Fue la mañana del 16 de noviembre, por la presión de vecinos afectados, que el presidente municipal Tomás Suárez Juárez intervino para que la dirección de comercio pusiera los sellos de suspensión.

    Esto se hizo porque la asfaltadora no contaba con los permisos correspondientes por parte del municipio.

    En lo que hace a la clausura del ISEM, esta se llevó a cabo cerca de las 14:00 horas del martes.

   José Cabrera Moran, verificador de Regulación Sanitaria Chalco y Luis Eduardo Olvera Cruz verificador administrativo de Regulación estatal, acudieron al camino viejo a Cocotitlán, donde se ubica la planta solicitando la presencia del representante legal y la documentación correspondiente.

    Al no presentarles nada y luego de explicarles los motivos de la suspensión de actividades, los funcionarios procedieron a colocar los sellos de suspensión.

   Cabe destacar los inspectores del Estado de México permitieron a trabajadores de la planta abrir un acceso adicional para que sacar sus vehículos y lo que consideraran pertinente.

    Alberto Aguilar, habitante del municipio aseveró a AMAQUEME que las autoridades los están tomando en cuenta por la frecuencia de enfermedades respiratorias y oculares provocadas por los contaminantes.

    Sin embargo, esperan que en los próximos días, lleguen representantes de la Procuraduría de Protección al Medio Ambiente del Estado de México (PROPAEM) para que verifiquen la planta y procedan a su clausura definitiva.

    “Sólo esperamos que autoridades de PROPAEM no se vendan por unos miles de pesos, porque estamos seguros que los dueños no cuentan con ningún permiso y sólo depende de esa procuraduría la clausura definitiva”, aseguro el vecino.