
Jorge Martínez Cordero
CHALCO, Méx.- Construido en el siglo XVI y remodelado a principios del XVIII, el inmueble que alberga “casas coloradas” ha sido testigo central de la historia de Chalco.
La casona edificada con tezontle rojo, que le dio su nombre desde sus orígenes, ha sido y sigue siendo utilizada para el comercio.
Jaime Noyola Rocha, arqueólogo y cronista municipal, en charla con AMAQUEME reveló información de gran valor para conocer parte de la historia del edificio más emblemático de Chalco.
Reveló que fue remodelado en 1716 y siempre se ha utilizado para el comercio, donde llegaban recuas de 40 y 60 mulas con sus arrieros cargadas con diversas mercancías provenientes de varios estados de la República.
Por encontrarse muy próxima al lago de Chalco “las casas coloradas”, contaban con cuatro muelles propios donde se embarcaba la mercancía para trasladarla en trajineras lo más pronto posible a la Ciudad de México.
Noyola Rocha dijo que un brazo de agua de diez metros de ancho era el que se unía al lago de Chalco por donde circulaban trajineras.
Desconoció quienes fueron sus primeros dueños, pero en la actualidad es la familia Cedillo, que comprometidos con la historia siguen conservando el inmueble dándole el mismo uso que tiene desde su creación.
Dio a conocer que originalmente ocupaba una extensión de aproximadamente 20 hectárea y actualmente sólo tiene mil 500 metros cuadrados.
Aseguró que los muros, castillos, contrafuertes, pisos, vigas y gualdras actuales, (piezas de madera maciza para soportar techos de una construcción) son originales, lo que significa que es una construcción muy longeva.
El cronista municipal, señaló que “las casas coloradas” ha sido mencionada en novelas como “Los bandidos de Río Frío”, la cual fue publicada en un periódico de época, a través de entregas, que los lectores esperaban ávidos de saber cada semana lo que pasaba.
Señaló que también ha sido mencionada en libros de arquitectura, arte y muchos más, debido a su gran belleza arquitectónica e historia.
El arqueólogo explicó durante el recorrido realizado a la casona, acompañado de los reporteros de AMAQUEME, que la mayoría de los pisos siguen siendo originales, hechos de basalto vesicular traído directamente de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
Para aquellos visitantes que quieran conocer este representativo edificio, se encuentra ubicado en la avenida Cuauhtémoc, a una cuadra del jardín principal.
Actualmente es ocupado por dos sucursales bancarias y consultorios médicos.