Alma Abilene Figueroa L.
TEPETLIXPA, Méx.- Casa Cuauhtemal elabora y distribuye productos derivados de la miel, desde miel natural hasta productos de cosmética como cremas y jabones.
Entrevistado por AMAQUEME, Erik Rosales Flores, biólogo de profesión y encargado del negocio, explicó que su proyecto se enfoca en dos vertientes, la tienda de productos ecológicos y una cafetería donde se hace cocina de conciencia.
“Principalmente en la tienda se trabaja con productos a base de miel, <<Casa Cuahtemal>>, tiene apiarios en la zona ejidal de Tepetlixpa, el lugar es denominado Cuauhtemal, de ahí el nombre del proyecto”, detalló el entrevistado.
Resaltó que su proyecto es totalmente familiar, donde se transforma lo que produce el campo, la miel y las plantas medicinales se trabajan para obtener cuatro líneas de productos.
“Tenemos la línea de alimentos, produciendo miel, mermeladas y combinaciones de miel con cacao, cúrcuma y espirulina, también manejamos la línea medicinal que es miel combinada con aceites esenciales, jarabes y comprimidos”, explicó a la reportera.
Además de las anteriores, dijo que también cuentan con una línea de cosmética natural, elaborando shampoos, cremas y jabones con extractos de plantas medicinales y extractos de la colmena
La cuarta línea que maneja “Casa Cuauhtemal” es la de vivero, que utiliza fertilizantes, abonos ecológicos, macetas de fibra de coco que son totalmente naturales y amigables con el medio ambiente.
“El campo produce y es muy generoso, sin embargo llega un momento en que tienes mucha producción, pero dónde colocas todo ese producto, y pues decidimos como primer paso la conformación de la tienda de productos ecológicos y después la cafetería”, comentó el biólogo.
En cuanto al proceso de elaboración, destacó que en la apicultura hay quienes se enfocan en la miel, otros en el polen, otros más en propóleo y algunos en jalea real, manejando diferentes procesos para cada especialidad.
“Nosotros nos enfocamos más en la miel y los propóleos, en la zona en la que nos encontramos existen dos cosechas al año, la de primavera y la de otoño, que es la cosecha más grande”, comentó.
Mencionó que uno de los productos que manejan es el jarabe de propóleo, que es una mezcla simple dónde se combina la miel natural con el extracto de propóleo que obtienen de las resinas de los árboles, principalmente del pino y el encino, complementándolo con aceites esenciales como menta y eucalipto.
“Para las cremas de cera de abeja, el proceso consiste en obtener la cera, fundirla, mezclarla y hacer emulsiones con agua y aceite de almendras y algunos aceites esenciales, es un proceso más complejo”, manifestó el entrevistado.
Dio a conocer que los costos de sus productos van desde un popotito de tres pesos o una paleta de cinco , hasta 180 que cuesta un litro de miel, y el producto con el costo más elevado es la crema de cera de abeja que cuesta 250 pesos.
“Hay muchos beneficios, el más evidente es el de la salud, ya que la miel es un producto que se conserva por sí misma, entonces no requiere conservadores adicionales o artificiales, también los aceites esenciales generan esa conservación y tienen propiedades antimicrobianas naturales, por lo que tampoco necesitan conservadores”, puntualizó.
Con respecto al proyecto de “La fogata”, que es uno de los últimos de “Casa Cuauhtemal”, informó que se trata de una cafetería donde se promueve la cocina con conciencia, es decir cocinar apegados a los procesos naturales.
“A veces no nos percatamos de que una pequeña acción, sobre todo una acción tan elemental como lo es la alimentación, tiene un impacto en el ambiente y el entorno”, señaló Erik.
Explicó que en la cafetería, ellos mismos elaboran sus salsas y sus catsups, evitando en todo momento los ultra procesados y utilizando siempre procedimientos, que aunque son más tardados tienen una calidad excepcional.
