
Gilberto Hernández Guzmán
SAN RAFAEL Méx.- Emilio Rosales Mendoza, aprendió a tatuar en el penal de Chalco y después de cumplir su condena de eso vive, cumpliendo con pasión gustos, ideas y caprichos de su vasta clientela.
“Jomek”, como se hace llamar y es conocido, reveló en entrevista con AMAQUEME que ingresó al centro penitenciario de San mateo Huiltzilzingo, Chalco en 2017 y ahí aprendió la técnica del tatuaje, pero no pensó en dedicarse y vivir de este oficio cuando saliera del penal.
Dijo que sus primeros trabajos, conocidos como “caneros” fueron en el mismo centro de reclusión.
Explicó que en un principio sólo utilizaba una aguja de chaquira y un motor, pero fue perfeccionando su técnica al paso del tiempo hasta que tuvo oportunidad de emplear las herramientas adecuadas.
. “Siempre me gustó el arte urbano, desde los 13 años me gusta graffitear, después de que salí de la prisión todo se fue acomodando, hasta ahora que ya lo hago de forma profesional, lo que es una carrera para mí”, comentó.
Confió que el arte del tatuaje le ha dado la oportunidad de ayudar a otras personas.
Dijo que lleva cinco años perfeccionando su técnica y tatuar le ha ayudado a cumplir sus metas.
“He tatuado a influencers a elementos de la Guardia Nacional, médicos, a la gente del barrio, entre ellos gente peligrosa, hemos tatuado de todo, el tatuaje me ha cambiado la vida, ya no hay necesidad de andar delinquiendo en las calles, el tatuaje me ha dado todo”, asentó.
Añadió que desde el 2006 alterna su oficio con el RAP y actualmente con su grupo está realizando un disco para promocionarlo en las diferentes plataformas digitales.
“Desde el 2006 comencé con el rap, lo puse en pausa cuando entré al reclusorio, cuando salí, continué con esta pasión y actualmente ya estamos preparando un disco con algunos colegas, esto ya es mas a nivel personal, ya que genera satisfacción propia”, externó “Jamek”.
Puntualizó que con perseverancia todo se logra sin perder de rumbo los objetivos y aunque estuvo en la cárcel no le impidió a continuar con sus objetivos, perseverancia que le ha llevado a tener su propio estudio de tatuajes.
“Jomek” ocupa un local en ex cine de esta localidad.
“A veces no tenemos todos los recursos, pero sí se puede, es increíble todo lo que uno puede hacer si uno se lo propone”, aseveró.