
Jorge Martínez Cordero
JUCHITEPEC, Méx.- En los meses transcurridos de este año, 15 accidentes automovilísticos tuvieron lugar en la curva de “las calaveras” que comunica este municipio con el de Tenango del Aire.
Pobladores que viven cerca, entrevistados por AMAQUEME revelaron dicha cifra, pues aseguraron haber sido testigos de la mayoría de esos percances que atribuyeron a lo pronunciado de la curva y principalmente a exceso de velocidad de los conductores.
Precisaron que en al menos siete de ellos el chofer falleció.
Hicieron un llamado a las autoridades correspondientes para colocar reductores de velocidad en ambos sentidos con el fin de disminuir los accidentes.
Dicho punto se encuentra en la salida del municipio y entrada a Tenango del Aire muy cerca de un vivero de árboles de navidad.
Los entrevistados afirmaron que la mayoría de tales percances han sucedido los fines de semana, cuando la afluencia de visitantes rumbo a Xochimilco y Oaxtepec es más alta, pues desconocen la carretera.
“Es una curva que pocos conductores conocen, por lo que muchos la toman a una velocidad alta sin medir las consecuencias y terminan volcándose, otros conducen alcoholizados y lo mismo pasa, no disminuyen su velocidad y se accidentan” afirmó Rogelio Alanís, habitante del lugar.
Carlos Carmona, quien también radica cerca de “Las calaveras”, afirmó que desde hace mucho tiempo así es conocido el lugar y calificó la curva de peligrosa y traicionera.
Señaló que si en el día se voltean por las noches es peor, debido a que el tramo está totalmente oscuro y no pueden ver lo cerrado del camino.
“En la noche sí es más peligrosa porque además de que es un punto totalmente oscuro, muchos conductores la bajan o la suben sin tomar sus precauciones y no saben calcular lo cerrada que está, les gana el peso del carro y se salen del camino”, aseveró.
Refirió que es una curva a la que se le debe tener respeto.
Ambos entrevistados recomendaron a los conductores tomar en cuenta lo peligroso del camino y reducir su velocidad para reducir el riesgo de sufrir algún accidente con consecuencias muchas veces lamentables.