Juan Lázaro Santiago/Reporterosenmovimiento.com
Así como Andrés Manuel López Obrador subió como espuma en el 2018 y más de 30 millones de electores le dimos el voto de confianza, así puede caer como un castillo de naipes con un solo soplido de la democracia.
Este domingo 26 de febrero en el zócalo de la CDMX se concentraron miles y miles de mexicanos para defender su voto y al INE ante el llamado Plan B de AMLO que busca acabar con la infraestructura del órgano electoral.
La concentración no fue en contra de López Obrador sino para demostrar la fuerza ciudadana ante los magistrado de la nación que tendrán la responsabilidad de avalar ese plan o desecharlo por violar la constitución política mexicana.
Aunque hubo cientos de gargantas que gritaron contra «López» en una afán de demostrar su molestia contra el presidente de México.
Los ciudadanos acudieron en su mayoría por voluntad propia, otros llevados por sus respectivos partidos políticos.
Andrés Manuel no pudo desarticular esa concentración en favor del INE a pesar de sus constantes agresiones verbales y mentiras, principalmente cuando dijo que se iba a defender a García Luna.
En verdad hay una molestia muy grande contra López Obrador por su intentona de querer controlar las elecciones con un órgano electoral afín a Morena.
Y sin entender razones, AMLO siguió con sus ofensas en la mañanera de este lunes 27 de febrero, acusando a los ciudadanos que acudieron a la marcha de «mapaches electorales» y «delincuentes de cuello blanco».
Es cierto que hubo líderes de partidos políticos que aprovecharon la movilización para hacer sus propias jugadas políticas como el PRD con su líder el ex gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, que realizó una marcha desde su estado natal al zócalo de la CDMX, pero la mayoría fueron ciudadanos.
Los electores no perdonarán a Andrés Manuel las constantes ofensas y su intento de convertir al INE en su propio órgano electoral y pronto pagará las consecuencias.
La pregunta que uno se puede hacer es sí en las elecciones del Estado de México influirá la movilización y la lucha ciudadana por defender su voto.
Los electores mexiquense le pueden dar la espalda a Morena y a su candidata Delfina Gómez Álvarez, cómo muestra de repudio a Andrés Manuel López Obrador.
Hasta el momento, todas las encuestas favorecen a la texcocana, pero todos los escenarios pueden cambiar como está movilización ciudadana que se concentró en el zócalo de la ciudad de México para defender al INE y al voto.
