Juan Lázaro Santiago
Durante y después del debate en el Instituto Electoral del estado de México (IEEM), Alejandra del Moral y los líderes de los partidos políticos que la respaldan han repetido una y otra vez que «las encuestas no votan».
La priísta Alejandra del Moral, le dijo a su oponente Delfina Gómez Álvarez, al final del debate del 20 de abril, que «las encuestas no votan, no hay nada escrito en piedra».
Y es que Horacio Duarte Olivares, coordinador de campaña de la morenista Delfina Gómez Álvarez, utilizó como estrategia la repetición constante en sus comunicados de prensa , sobre las encuestas que le dan de 14 a 20 puntos de ventaja a la maestra texcocana.
Encuestas que se han repetido miles de veces en las redes sociales, periódicos digitales e impresos que de alguna forma han influido en el ánimo del electorado.
Es más, es la más efectiva arma de campaña de Morena para decir que pese a las débiles propuestas de Delfina Gómez, la gente va por el cambio en el estado de México.
Erik Sevilla, líder del PRI Edoméx, antes del debate decía que las encuestas eran «una foto del día» o algo parecido. Nada que temer.
Pero exigía, junto con Alejandra del Moral, que se realizaran cinco debates, como estrategia para abatir esas encuestas o al menos empatar en la preferencia electoral.
Pero el IEEM solo programó dos debates, el 20 de abril y el 18 de mayo, aunque Alejandra del Moral, en el primer debate, desaprovechó su oportunidad de noquear a Delfina, como lo presumió públicamente.
Del Moral trató de conectarle unos buenos puñetazos mediáticos, pero a lo más lejos que llegó fue la de hacerle unas cuantas fintas, que no cambió las preferencias electorales.
Pero en el ánimo de los jerarcas del PRI, del PAN y del PRD (y de Alejandra del Moral) sí pesa la difusión masiva de los resultados de las encuestas, aunque ellos los califican de «falsas» o «patito».
Por ello, Juan Carlos Nuñez Armas, un líder del PAN en Toluca (por cierto que ya tuvo la oportunidad de ser alcalde de esa ciudad y diputado) se encargó de presentar una queja ante el Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM) para que sancione a las empresas encuestadoras, con tal de que dejen de difundir resultados favorables a Delfina Gómez.
Su queja fue aceptada en algunos casos, en otras no, el principal argumento es que no se presentó ante el INE, la metodología o que haya sido aprobado por algún órgano electoral.
Pero insisto, el plan de la alianza PRI/PAN/PRD es que disminuya la publicación de encuestas a favor de la morenista, que está afectando mucho la candidatura de Alejandra del Moral.
Es tanta la preocupación de la triple alianza oficial que después de que dicen y dicen que las «encuestas no votan», salen a decir el pasado 25 de abril que Morena difunde encuestas «patito» y que ellos «la van a alcanzar y ganar».
“El que alcanza, gana”, presumieron el PRI, PRD, PAN y Nueva Alianza.
«Las encuestas estaban viciadas y no eran a la realidad. Son encuestas pagadas y patito», insistieron.
Ellos mismos presentaron sus propias encuestas «las buenas», «las reales», donde también reconocen que Delfina Gómez lleva la delantera, pero «nomás poquito».
Según los opositores de Morena, Buendía y Laredo coloca a la candidata Alejandra del Moral a 9 puntos de Delfína Gómez; la de Beltrán G. C. donde se establece una diferencia de 8 puntos; Massive Caller 5.6 por ciento y la de Rubrum 4.2.
En el fondo los opositores a la 4T dicen y aseguran que en la primera quincena de mayo «empatan» a Delfina Gómez. ¿Cómo ven a los magos de la política?
Sin embargo, en su misma conferencia de prensa, reconocieron que Delfina Gómez tenía una ventaja de 20 puntos (¿ No que eran falsas?) pero que Alejandra del Moral «está creciendo».
La verdadera encuesta se tendrá el 4 de junio, donde se verá si las encuestadoras fueron acertadas en sus pronósticos o todas estaban equivocadas. El elector tiene la última palabra (si es que sale a votar).
