
Jorge Martínez CVordero
TEMAMATLA, Méx.- Sin radio de comunicación, armas ni sanitario cumplen con su turno de 24 horas los policías asignado a nueve módulos de seguridad ubicados en diferentes puntos del municipio..
Cada uno de esos reducidos espacios, de apenas dos metros y medio por dos, los uniformados deben cumplir su jornada diaria de trabajo, donde hasta ellos sienten temor de ser asaltados por la delincuencia porque no cuentan con armas para defenderse.
La mañana del sábado tres de junio, un oficial contactó al reportero de AMAQUEME para informar lo anterior y sostener el gobierno municipal no los dota de las mínimas condiciones para su seguridad personal.
Denunció, que aunado a lo anterior, los módulos carecen de baño para sus necesidades fisiológicas, y así llevan dos meses trabajando.
Contó que dos de cuatro módulos empezaron a funcionar hace cinco semanas, cuando fueron inaugurados y entregados a seguridad púbica por el alcalde José Antonio Vallejo Gama para brindar seguridad a la población.
“El presidente dijo a los vecinos de cada módulo en su entrega que son para brindarles seguridad, pero si los primeros que estamos expuestos a un asalto o algo más somos a quienes nos asignan al módulo, ni cómo pedir ayuda a la comandancia y ni arma nos quieren dar”, informó el oficial, que por razones entendibles omitió su nombre.
Denunció que los mandan a la guerra sin fusil, ya que tampoco cuentan con un radio de comunicación para solicitar ayuda en caso de ser necesario, mucho menos con arma para su seguridad.
Se preguntó cómo podrían brindar seguridad a la población si hasta ellos están inseguros.
Agregó que diariamente enfrentan un problema básico las horas que cumplen su jornada en el módulo, debido a la falta de baño, por lo que deben cerrarlo para ir hasta la comandancia en su bicicleta.
Dijo que otros compañeros no tienen más opción que ir atrás de un carro o de un árbol.
“Es el colmo que no se haya pensado en un sanitario, así no se puede trabajar” aseveró el entrevistado.
Externó finalmente que ya le gustaría ver a sus mandos o algún funcionario hombre o mujer permanecer un par de horas en alguno de los módulos, y les apremie las ganas de ir al baño, a ver qué hacen.