
Jorge Martínez Cordero
**Hasta con 20 horas de antelación llegan para apartar un lugar derecho habientes en el ISSSTE para conseguir una ficha médica
CHALCO, Méx.- Guardias de seguridad, personal administrativo de la clínica regional del ISSSTE y personas que apartan lugares en el exterior, venden de 400 a 600 a derecho habientes tanto las fichas de consulta como los espacios.
Lo anterior afecta a usuarios que llegan de madrugada para tratar de conseguir una de las únicas 60 fichas que diariamente se otorgan o un lugar, sorprendiéndose de que ya están apartados.
Usuarios entrevistados por AMAQUEME el jueves cinco de octubre, denunciaron esta cotidiana práctica, cometida por vecinos de la clínica ubicada en Cinco de Febrero y María Félix de la colonia La Bomba, dedicados a apartar los lugares con bancos de plástico, sillas, botes, cubetas, piedras o con lo que puedan para posteriormente venderlos.
Aseguraron que en muchas ocasiones quienes compran esos espacios lo hacen para evitar llegar a formarse temprano, ocasionando que muchos usuarios que llegan desde la madrugada no alcancen, porque son más de diez los que regularmente se apartan.
Denunciaron que aunado a ello, en complicidad, guardias de seguridad y personal del archivo clínico también ofertan las fichas en 400 y 500 pesos, siendo menor la posibilidad de obtener algún lugar.
Los denunciantes manifestaron su inconformidad por el proceder del personal de la unidad médica.
Dijeron estar seguros que de la venta de fichas, el director de la unidad está enterado, porque han sido varias veces que se lo han hecho saber y lo único que ha hecho es poner oídos sordos, pues sigue la misma irregularidad y corrupción.
Apuntaron que aunque es sabido por quienes buscan una ficha que son pocas las que se liberan, por el contrario existen muchas las anomalías.
Dijeron que durante las madrugadas el número de derechohabientes supera los 100 con la esperanza de alcanzar un lugar.
Aseveraron que hasta con 20 horas de anticipación comienzan apartar lugares, tanto personas que no son derechohabientes como los verdaderos usuarios.
“Me ha tocado llegar desde las 12 de la tarde, dejar mi banco y regresar por la noche para quedarme toda la madrugada y hasta las siete de la mañana del otro día cuando empiezan a repartir las fichas y muchas veces mi banco ya no está donde lo dejé, sino varios lugares más atrás”, manifestó uno de los afectados que prefirió omitir su nombre por miedo a que ello implique negativas para ser atendido.
Informó que por ser la única clínica en esta región llegan derechohabiantes de Ixtapaluca, Chalco, Los Reyes, Tlalmanalco, Valle de Chalco y hasta de Tláhuac. El grupo de denunciantes aseguraron no les queda otra forma más que denunciar todo está práctica para que funcionarios de mayor nivel del ISSSTE se enteren e intervengan para ponerle fin al negocio de todos los involucrados en ella