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2 de julio

 Otras funcionarias  que luchan también por el respeto a las mujeres,  prestan «oídos sordos».

Juan Lázaro Santiago

Hace unos días (21 de noviembre), tres mujeres sufrieron una embestida policial en Chimalhuacán; una agresión física, verbal y administrativa, pocas vistas en el estado de México.

Más de 150 policías -entre ellas los más fieros en represiones- fueron enviados por la alcaldesa Xóchitl Flores y su esposo Benito Miguel Pérez, para reprimir a tres mujeres que defendían una base de mototaxistas en la parte baja de Chimalhuacán.

Las imágenes de la represión son muy claras: se ve como mujeres policías inician el sometimiento, luego el jaloneo y los golpes.

Los uniformados continuaron con su tarea represora y practicamente se llevaron cargando de pies y manos a Maricela Matus, dirigente del grupo Xitle  y a Guadalupe Aparicio, una de las mujeres que trató de salvarla, la revolcaron en el suelo.

Además, en el escenario estaba otra mujer que también sufrió similares consecuencias.

Se trataba de tres mujeres que defendían la fuente laboral de cuatro motoxistas, si cuatro motoxistas, que dan este tipo de servicio para mantener a sus familias.

El fondo del problema y el origen de la represión es que Miguel Benito Pérez, esposo de la alcaldesa Xóchitl Flores quiere el control de todas las bases de mototaxistas y la que defendía las tres mujeres no era la excepción.

Lo peor es  que en este gobierno de Morena en Chimalhuacán prevalece el garrote y no el diálogo, así como el acuerdo para evitar este tipo de agresión policial.

Posterior a esa agresión en Chimalhuacán, la gobernadora Delfina Gómez, acudió a este municipio a decir que habían bajado los índices de inseguridad, pero ni por enterada de la agresión que sufrieron tres mujeres.

Eso sí, previo a Chimalhuacán estuvo en Nezahualcóyotl, donde la gobernadora y la secretaria federal de Seguridad y Protección, Rosa Icela Rodriguez, hablaban de protección a la mujer y a la niñez.

Mientras que tres mujeres fueron agredidas física, verbal y administrativamente por funcionarios de Chimalhuacán (tuvieron que pagar multas para no seguir detenidas y aún les cobraron más de 8 mil pesos para liberar del corralón una moto), las gobernantes morenistas dan discursos huecos sobre la defensa de la mujer.

Pero no solo Delfina Gómez y Rosa Icela Rodriguez presumen de la lucha a favor de los derechos de las mujeres, sino también están las de Derechos Humanos en Edoméx, Myrna Araceli García y la de la secretaria de la Mujer,  Mónica Chávez Durán, que hablan y hablan de proteger a las mujeres, pero solo en el discurso.

Hay denuncia en Derechos Humanos y en la Fiscalía General de Justicia del estado de México, sobre está situación y se espera que alguna autoridad, si alguna autoridad de justicia o social intervenga y eviten que más mujeres sean maltratadas por funcionarios municipales o policías, solo por obedecer consignas políticas.

En Chimalhuacán hay evidencias públicas de que hubo represión hacía tres mujeres, pero Delfina Gómez celebra junto con otros funcionarias 16 días de activismo contra la violencia de género en Neza.

Qué ironía.

EN NEZA INVITADAS DE LUJO CONTRA LA VIOLENCIA CONTRA MUJERES

A Delfina Gómez y a Rosa Icela Rodríguez la acompañaron a Neza, la Presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman; la encargada del despacho de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), Sayda Blanco; la Comisionada de Derechos Humanos del Estado de México, Myrna Araceli García, y la Secretaria de las Mujeres mexiquense, Mónica Chávez Durán.

Y nadie mete las manos para defender a las tres mujeres agredidas en Chimalhuacán, tal vez porque es un gobierno morenista y goza de cierta impunidad.

EL «ROLLO» DE ROSA ICELA

Vea lo que dijo la Secretaria Rosa Icela Rodríguez.

El Gobierno de México, la administración mexiquense y Nezahualcóyotl trabajan para garantizar el derecho de mujeres y niñas a vivir una vida libre de violencia, para lograr que caminen seguras, sin miedo, libres y plenas.

Delfina Gómez expresó 

“¿Por qué no trabajamos de manera conjunta para lograr una sociedad, de verdad, menos violenta?

¿Hay que empezar en Chimalhuacán no maestra?.