***Maestros y paterfamilias reclaman medida al alcalde
Jorge Martínez Cordero
VALLE DE CHALCO SOLIDARIDAD, Méx.- Funcionarios de las direcciones de gobierno y desarrollo urbano colocaron sellos de suspensión a una obra que se construía en el kínder “José María Morelos y Pavón”.
La escuela tiene más de 30 años de existencia.
En el espacio destinado a unas canchas de basquetbol del jardín, ubicado en la avenida División del Norte de la colonia San Isidro, también utilizado por los niños para actividades recreativas se pretendía construir una barda perimetral.
La medida se tomó porque el predio en cuestión pertenece al IMCUFIDE, además de que vecinos del centro escolar reclamaron también el espacio por ser un área verde.
Ante ello padres de familia de alumnos actuales y de generaciones pasadas se inconformaron por la situación y pidieron a Armando García Méndez, presidente municipal que en lugar de frenar el mejoramiento de la escuela, por lo menos permita la obra referida que no le está costando nada a su administración
Fuera de la escuela, Dulce Lizeth y Alison Castillo mamás de alumnos, acompañadas de más de una treintena de padres, señalaron que se han inconformado por el actuar del presidente y la manera de cómo están haciendo las cosas para impedir a toda costa se realice una mejora para la institución y en consecuencia se les brinde seguridad a sus hijos.
Informaron en entrevista con AMAQUEME que las autoridades de la escuela cuentan con un acta de cabildo donde se hace constar que el predio, así como el espacio que ocupan los niños para sus actividades de recreación pertenece al colegio.
Apuntaron que no encuentran motivo para que el gobierno municipal haya suspendido la barda perimetral para mantener seguros a los niños.
Señalaron que el preescolar fue beneficiado con el programa federal “La escuela es nuestra” y en asamblea los padres de familia acordaron y aprobaron la obra para protección y seguridad de los pequeños.
Dijeron que la construcción causó inconformidad de cinco vecinos que acudieron al municipio y en respuesta, el 29 de mayo se colocaron cinco sellos de suspensión.
Autoridades educativas y padres hicieron un llamado al gobierno estatal y federal para que intervengan y hagan entender a la administración local la importancia de la obra, ya que es un beneficio para la comunidad y los niños.
Pidieron además se permitan la continuación del mejoramiento de la institución ya que tiene muchas carencias y con el apoyo obtenido del programa “La escuela es nuestra” será una forma de remediarlas.
Dulce y Alison asentaron que es necesario y urgente que se realice una inspección de protección civil estatal al kínder, ya que los más de 140 niños que ahí estudian en seis salones corren un grave riesgo por estar en viejas y deterioradas aulas con láminas de metal, instalaciones que en cualquier momento pueden colapsar con lamentables consecuencias.
Urgieron a las autoridades municipales para que permitan el reinicio de la obra y en lugar de hacer caso a unas cuantas personas que impiden el avance en la educación, actúen con inteligencia en favor de los niños del jardín.
LABERINTO
