***El agua entró con fuerza a casas construidas junto al cauce y arrastró tres vehículos que terminaron en una barranca de Miraflores

Jorge Martínez Cordero
SAN MATEO TEZOQUIPAN MIRAFLORES, Méx.- Decenas de casas construidas junto al cauce del río La Compañía se inundaron y tres vehículos fueron arrastrados por la fuerza de la corriente, acabando en una barranca.
«En los más de 75 años que tengo viviendo en Miraflores, jamás ocurrió algo semejante; el desbordamiento del río ha marcado la vida de San Mateo para siempre», afirmó Javier Aparicio, uno de los muchos habitantes afectados por el desbordamiento del río la tarde-noche del miércoles 28 de agosto.
Vecinos de la calle Miguel Hidalgo, cuyas casas están prácticamente a orillas del río que conduce aguas negras, dijeron que lo vivido los marcó para toda la vida. Aseguraron que cerca de las ocho de la noche, lo que vieron a través de las ventanas en la parte alta de sus casas fue algo terrorífico, ya que nunca antes había sucedido algo así.
Entrevistados por AMAQUEME, coincidieron en que todo se convirtió en un solo río, un río gigante donde prácticamente el mamposteo de las orillas, árboles, banquetas y la calle desaparecieron por varios minutos.
Comentaron que la corriente del agua corrió con tal furia que arrastró todo lo que encontró a su paso.
«Hasta vehículos que se encontraban estacionados en la calle fueron arrastrados con tal facilidad por la fuerza del cauce y terminaron volcados dentro de la barranca por donde corre el agua», señaló Jorge Luis Soto.
Apuntó que desde las 15 horas comenzó a llover, y pensando que sólo sería una lluvia como las demás no se alarmó.
Sin embargo, alrededor de las ocho volvió a caer otra lluvia con mayor intensidad, por lo que rápidamente el nivel del río comenzó a crecer, rebasando el mamposteo que sirve como protección en sus orillas.
Asimismo, señaló que el agua comenzó a entrar rápidamente en las casas de muchos de los que ahí viven.
También contó que se escucharon golpes y al salir a ver de qué se trataba, vio que dos automóviles, arrastrados por el agua, fueron lanzados al fondo de la barranca y quedaron atorados en las paredes de cemento de un puente peatonal.
Informó que además de esos vehículos, también una camioneta Eurovan sufrió el mismo destino.
Los daños fueron notables en toda la calle Miguel Hidalgo, hasta donde, de acuerdo con los habitantes, la ayuda por parte del gobierno municipal fue inmediata.
Desde la misma noche del miércoles, personal del ayuntamiento de varias áreas comenzó a brindar ayuda y a limpiar la calle y las casas afectadas.
Vecinos de calles aledañas, como Geranio, Tulipán, Jazmín y la tercera cerrada de Geranio reportaron pérdidas totales en sus inmuebles, por lo que los propietarios solicitaron la ayuda inmediata de la gobernadora del Estado de México, así como del gobierno federal.
«Fue una pérdida total de todo, absolutamente todo nuestro patrimonio. Nos hemos quedado sin nada, y si digo nada, es así, literal: no tenemos ya nada», asentó Carolina León Rosas, profesora de un jardín de niños que lo perdió todo.