
Jorge Martínez.
SAN MARTÍN CUAUTLALPAN, Méx.- El agrietamiento del suelo surgido el viernes siete de junio en la unidad habitacional Pueblo Nuevo, provocó la afectación de paredes y pisos de al menos siete viviendas.
Lo anterior generó preocupación y temor en propietarios de los inmuebles, que requirieron la presencia de protección civil municipal para valorar las construcciones y darles un informe.
Vecinos dieron a conocer a AMAQUEME que más de siete casas sufrieron grietas que atravesaron cuartos, pisos, bardas y calles de claustros, perdiéndose el orificio en terrenos aun no habitables que están siendo preparados para nuevas viviendas, sin importar a los dueños de la inmobiliaria el riesgo que representa el suelo fracturado.
Juan Antonio Aguilar Galicia, director de protección civil municipal, atribuyó las causas al reblandecimiento de la tierra por el agua de un vaso regulador cercano a la unidad.