
Jorge Martínez Cordero
Originaria de la sierra de Oaxaca, Martina, madre soltera de tres hijos emigró al Estado de México y con su trabajo y creatividad en la elaboración de prendas típicas, superó vejaciones y miserias y hoy se gana la vida elaborando prendas típicas de su estado.
La falta de trabajo a su llegada a Chalco la obligó a desempeñar varias actividades, principalmente como doméstica, hasta que decidió poner en práctica lo que su abuela le enseñó cuando era niña, el bordado artesanal de vestidos en telares de madera y a mano, de cuya venta mantiene a sus hijos.
Martina Carrasco Martínez confió a AMAQUEME que en sus primeros trabajos fue objeto de frecuentes vejaciones y discriminación por su origen, forma de hablar y vestimenta.
“Sólo estudié hasta la secundaria en Santa María Tejotepec, Oaxaca, siempre viví en la pobreza, pero en mi casa me eduqué con valores y amor al trabajo desde que era muy pequeña”, aseguró.