ECATZINGO, Méx.- Misael Alejandro Pérez se llevó a la tumba los motivos que tuvo para terminar con su vida.
Sin embargo, sus familiares informaron a policías de la Secretaría de Seguridad estatal, que el joven de 21 años enfrentaba problemas de adicción a las drogas y consideraron que esa pudo haber sido la causa.
Misael lo encontró su padre, Juan Carlos Pérez Rosales colgado del techo de madera de un taller de carpintería ubicado en la casa donde vivía, poco antes del mediodía del sábado cinco de septiembre.
Policías de la Secretaría estatal de Seguridad ciudadana informaron que el hoy occiso empezó a consumir enervantes desde adolescente, lo que generaba frecuentes choques con su progenitor y otros miembros de su familia.
Dijeron que posiblemente, agobiado por su ello y la falta de una atención especializada para alejarse de las drogas, prefirió suicidarse.
Los hechos tuvieron lugar dentro de una vivienda localizada en la calzada San Miguel número 24, del barrio del mismo nombre.
Los uniformados indicaron que por comentarios del progenitor del occiso, este acostumbraba salirse con frecuencia de su casa y desaparecer por largas horas.
