
Jorge Martínez Cordero
CHALCO, Méx.- Ni sus limitantes físicas ni problemas de salud, que lo mantienen postrado en una silla de ruedas, desalientan a Víctor Guzmán, quien diario se gana la vida imitando a Juan Gabriel en calles del centro de Chalco.
El reportero de AMAQUEME lo entrevistó la mañana del miércoles 21 y recordó que hace seis años sufrió la amputación del pie izquierdo a consecuencia de la artritis gotosa que padece.
La voz gemela de Juan Gabriel, es como conocen a Víctor, que desde antes de usar la silla de ruedas ya trabajaba cantando los éxitos de su artista favorito.
De esa forma se mantiene y aun costea la escuela de su hija de 16 años.
Dijo que su enfermedad se le complicó hace seis y tuvieron que amputarle el pie y su tobillo.
“El suceso no me derrotó, pues el motor principal de mi vida es mi hija”, confió la voz gemela del divo de Juárez, que ya cumplió dos años de trabajar en las calles de este municipio en su silla de ruedas.
Externó que el gusto por las melodías de Juan Gabriel lo trae porque desde siempre fue el artista predilecto de su madre, “siempre escuché en la radio y televisión sus canciones y llegué a aprendérmelas, desde hace 17 años es lo que me da de comer”.
El interprete urbano manifestó que las condiciones en que ahora se encuentra no han le han impedido moverse de un lado para otro.
Aseguró que ha trabajado en Amecameca, Texcoco, Valle de Chalco, Ixtapaluca y ahora en Chalco donde fue sido acogido con buena cara.
Refirió que diariamente trabaja un priomedio de cinco horas, tiempo en el que canta un aproximado de 100 canciones, y así lo hace durante todos los días de la semana, apoyado con una bocina de sonido portátil que carga para todos lados, como instrumento obligado.
Víctor Guzmán enfatizó que la canción que interpreta con más sentimiento se llama “Ya lo pasado, pasado” porque refleja parte de su vida, siendo la infaltable de su repertorio diario.
El entrevistado invitó a quien esté en posibilidad de apoyarle con una silla de ruedas o con lo que tenga voluntad, lo puede encontrar de lunes a domingo de nueve de la mañana a cinco de la tarde en la calle Reforma, entre Vicente Guerrero y Cuauhtémoc donde trabaja cantándole a la vida.