Mónica Martínez Rivera
COCOTITLÁN, Méx.- Sigue en pie, a más de 400 años de su construcción el Chapitel donde religiosos españoles evangelizaron a los indígenas de comunidad.
La edificación está considerada la única en el país que aún se conserva intacta.
El chapitel, ubicado frente a la iglesia de San José fue construido en 1590 y ahí se oficiaban misa y acudían, explicó en entrevisrta con AMAQUEME José Concepción Guzmán Núñez, cronista e integrante de la comisión histórica de este municipio.
Agregó que estas capillas pequeñas sirvieron para que asistentes a un tianguis que se realizaba en la población escucharan misa y se aprovechaba para evangelizarlos.
“Ese espacio sólo el párroco y un acólito podían ocuparlo, pues los vecinos tenían prohibido subir a la ermita porque representaba el cielo, por ello para llegar a este tenían que subir los 13 escalones”, explicó.
Dijo que actualmente se dejó de usar de manera religiosa, pero se ocupa como tribuna de asuntos políticos y culturales.
Recordó que 1970, en el chapitel, el exgobernador del Estado de México, Carlos Hank González y el secretario de recursos naturales federal cancelaron la expropiación del agua de la zona como el gobierno federal pretendía hacerl.
Manifestó que lo mismo sucedió en algunas elecciones de presidentes municipales.
“Además de ello se realizan eventos culturales y es el punto de reunión para exigir a los presidentes solución a un problema”, externó el entrevistado.
Guzmán Núñez señaló que ha buscado más construcciones de este tipo en el país sin éxito.
Informóp que en Cuernavaca le dijeron que había una, pero no ha logrado encontrarla, asimismo le informaron que en Perú hay otro pero no ha encontrado datos de su existencia, convirtiendo al chapitel de Cocotitlán como el único existente emn México, del siglo XV.
Detalló que posteriormente se construyó la primera iglesia a finales del siglo XVII y principios del siglo XVIII, la cual se encuentra en el cerro del Calvario, en donde se rinde honor a la virgen de Guadalupe.
Explicó que dicho lugar era un santuario prehispánico, pues en este se encuentran alrededor de 18 imagines grabadas en las rocas que datan desde la época prehispánica, entre ellas se encuentra un sartén que sirve para saber cómo será la época de lluvias, un «gris» que es un ser de otro planeta, una calaverita y una flor.
Cabe destacar que el templo se abre los domingos para oficiar misa y se pueden apreciar rasgos prehispánicos en su decoración y edificación.
