13 de marzo
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Abilene Figueroa López

    ECATZINGO, Méx.- En este municipio existen seis bóvedas y 14 puentes por donde pasaba el ferrocarril San Rafael-Atlixco escondidos entre la maleza, que fueron usados durante la revoilución.

   Por su antigüedad e historia, el gobierno municipal ha solicitado al Instituto Nacional de Antropología e Historia reconocerlos como monumentos históricos, pues su construcción rebasa los 112 años.

   Entrevistado por AMAQUEME, el cronista de este municipio, José Luis Reyes Sánchez mencionó que en poco tiempo podrá reunir la información necesaria para hacer la solicitud formal ante el INAH.

   “Para rescatar estos lugares y que el municipio pueda aportar recursos económicos sin incurrir en algo ilícito, es necesario que el Instituto Nacional de Antropología e Historia los reconozca como monumentos históricos”, puntualizó.

   Refirió que el INAH les pide tres cosas importantes para que sean considerados monumentos históricos: llenar una solicitud, presentar fotografías de ellos y contar con los planos del sitio.

   Dijo que con ese propósito se ha apoyado del arquitecto Luis Quetzal R, quien ya acudió a realizar la medición de los puentes y las bóvedas para tener los planos a la brevedad.

   Asentó con esa información se podrá realizar su registro en el catálogo de monumentos históricos del INAH.

   La reportera de AMAQUEME, en compañía del Cronista visitó varios de los puentes y bóvedas que tienen más de cien años.

   Por el desuso, olvido y paso del tiempo, la melsa los ha ido cubriendo gradualmente.

   Es importante señalar, que lo que fuera la estación del ferrocarril ahora es utilizada como casa particular por un vecino de este municipio de Ecatzingo, que la reclama como propia por el tiempo que ahí lleva viviendo.