Alma Abilene Figueroa L.
OZUMBA, Méx.- Acompañado de familiares y amigos, Juan Carlos Lima Correa festejó con danzas y ofrendas el primer aniversario de su temazcal Cozcacuauhtli.,.
Entrevistado por AMAQUEME, comentó que el tres de octubre del año pasado hicieron la primera ceremonia donde construyó su temazcal, para solicitar el cobijo de los cuatro elementos naturales: agua, fuego, tierra y aire y ofrecerlo como un lugar de medicina.
«Este año agradecemos porque transcurrió un ciclo lleno de muchas flores, de mucha abundancia, de muchos cantos, y estamos aquí ofrendando una danza, unas palabras, para seguir agradeciendo al universo que hoy se pueda transmitir toda esta medicina», manifestó.
Dijo que en la ceremonia, la danza es una forma de atraer a los elementos, por su presencia en la vida cotidiana.
Con la danza le agradecen y les hacen saber lo importante de su presencia.
«La ofrenda se compone de todas las cosas que traen las personas que vienen, pueden traer desde flores, frutas, dulces, tabaco, copal, lo que alguien traiga de corazón es bien recibido para el temazcal y para compartirlo entre las personas que están aquí ofrendando su sudor en la danza y dentro del temazcal», refirió.
Explicó que Cozcacuauhtli, significa águila calva y hace referencia a las aves carroñeras, a los zopilotes, a los buitres, al cóndor, y por esa razón el temazcal posee una estatua alusiva a estos animales.
«Como su surgimiento fue en la temporada de otoño, acercándose más hacia la venida de nuestros difuntos, habla de transmutación, de muerte, de renovarse y por eso lo adornamos con cempasúchil, con veladoras, para que esté orientado a esta temporada del año», declaró Juan Carlos.
Indicó que dentro del temazcal se realizaría otra ceremonia, a la cual por respeto a los visitantes no se le permitió la entrada a la reportera, pero se le explicó que dicho culto estaría lleno de cantos y medicina tradicional, finalizando con una convivencia para dar gracias por el día.
El entrevistado reveló que estudió la licenciatura en salud intercultural por lo que desde hace tiempo estuvo encaminado a la danza y los temazcales.
Dijo que fue ideando el temazcal de acuerdo a su visión, inspirado también en el temazcal «Ak-Ek, la estrella tortuga», del maestro Omar Almazán, el cual está un poco enterrado.
«Como en la simbología, es un vientre que simboliza a la madre tierra y al entrar regresamos a nuestro origen, lo quise hacer un poco enterrado para sea más fuerte esa simbología y también porque hacia abajo es el Mictlán, hacia abajo es la tierra donde vamos a la introspección, entonces literal entramos debajo de la tierra», afirmó.
Relató que para la construcción del temazcal, Juan Carlos contrató a un albañil que lo hiciera bastante reforzado y bien estructurado, sin embargo, estuvo como chalán ayudando en cada proceso.
«Todas las noches, mientras lo estábamos elaborando, me sentaba aquí, hacía cantos, oraciones, rezos para que se sintiera que se estaba germinando algo y que tuviera el sentido de que está naciendo», aseveró.
Dicho temazcal está abierto al público, ya que su propietario afirma que la medicina es para todos y programa sesiones con máximo 15 y mínimo 6 personas, asimismo dispone de uno cada fin de mes, dedicado especialmente para sus pacientes.
Además de Juan Carlos, la reportera entrevistó a Gerson Iván Corrales Martínez, cuya función fue ser el águila de fuego, papel que desempeñó junto a otro compañero.
«Las águilas de fuego, son los encargados de cuidar el fuego para las piedras, siguiendo de cerca el proceso energético para después meter las piedras en el temazcal», testificó.
Señaló que regularmente se introducen 9 o 13 piedras, las cuales se tornarán color rojo en el interior del temazcal.
«Es una cuestión energética, se dice que los números impares tienen que ver más allá de la cosmovisión mexicana», aseguró.
