
“La Cachucha” es la abuela de las pulcatas de Chalco. Abrió sus puertas a fines de 1910, cuando en las calles de Palma y Victoria, su único domicilio, sólo había campos de siembra y pastizales.
Su actual dueño Eduardo Zamudio aseguró a AMAQUEME que desde sus inicios ha pertenecido a su familia, que lleva administrándola siete generaciones.
Informó que “La cachucha” siempre ha estado en las calles de Palma y Victoria, barrio de San Antonio y lleva más de un siglo vendiendo “baba” de oso, neutle, “pulmón” y elixir de los dioses, como también es nombrado el pulque.
“Yo empecé a trabajar en ella muy chamaco, que recuerde desde los siete años, un rato me fui para los Estados Unidos, al volver, de nuevo me encarrilé en esto, y hace 11 años me quedé definitivamente con “La cachucha”, contó Lalo Zamudio.