**La materia prima la extrae de cerros de su natal Puebla
IXTAPALUCA, Mex.- Fernando Pérez Martínez, artesano originario de San Salvador el Seco, Puebla se dedica a la labranza de piedra volcánica, cantera y mármol, materiales que elabora y comercializa en diversas formas y tamaños.
De manera cotidiana se coloca en la avenida Corralejo, frente a la unidad habitacional Geo Villas de Santa Bárbara.
Comercializa una amplia variedad de artesanías y utensilios de cocina como molcajetes, comales, morteros, figuras de animales y religiosas, metates, molinos, entre otros.
Pérez Martínez, quien reside en Santa Martha Acatitla, Ciudad de México lleva adelante este oficio familiar heredado de su padre, Javier Pérez Contreras, ya finado, asentando que ha trabajado con piedra de una cantera ubicada muy cerca de su pueblo natal, la cual tiene cientos o quizá miles de años.
Con ello, asegura la autenticidad de sus productos.
A pesar de la modernización de herramientas como los esmeriles, su proceso sigue siendo mayoritariamente artesanal, utilizando cinceles y masetas para moldear y terminar cada una de las piezas.
La innovación y la creatividad en el diseño son aspectos clave de su trabajo, ya que personaliza los pedidos bajo la premisa de que «la imaginación es el límite».
Los molcajetes, comales y morteros son los productos más demandados, aunque también hace fuentes, figuras decorativas y otros utensilios de mayor tamaño, que requieren más tiempo de trabajo debido a su precio y volumen.
Las variedades de cantera que ofrece incluyen colores como rosado, anaranjado y beige.
Además de su propia producción, este artesano colabora con familiares y conocidos, quienes contribuyen en la elaboración de las piezas.
Este modelo de trabajo en red no solo facilita la distribución de los productos en diversas zonas, sino que también favorece la colaboración en tiempos de alta demanda.
“En ocasiones tengo que ir a mi pueblo para realizar trabajos especiales. Cuando se trata de encargos grandes es difícil realizarlos donde vivo debido al ruido y al espacio limitado, lo que molesta a los vecinos”, informó Fernando.
Los precios de sus artesanías varían según el tamaño.
Por ejemplo, un molcajete de siete pulgadas se vende a 290 pesos, mientras que uno de diez alcanza los 450 pesos. A medida que aumenta el tamaño, también sube el precio.
A través de su página web «Cantera Creación y Arte», Fernando Pérez Martínez promueve sus productos y se mantiene en contacto con los clientes, asegurando que, aunque su trabajo se apoya en la tecnología, sigue siendo genuinamente artesanal.
Hizo un llamado a respetar los precios y evitar el regateo excesivo, especialmente porque su trabajo es cien por ciento es artesano y su calidad no se compara en lo más mínimo con productos de imitación y pésima calidad en tiendas de autoservicio.
“Muchos de esos productos son de imitación y de calidad china, por lo que en corto tiempo se rompen o dejan de ser útiles” asentó.
Pérez Martínez, quien considera un orgullo continuar el legado de su familia, enseña a sus hijos el valor del trabajo y del negocio, transmitiéndoles las tradiciones que definen su vida y su comunidad, informando que pueden también localizarlo para cualquier pedido en el número telefónico 56 4505 3917
