12 de marzo

***Publicación de AMAQUEME el día del siniestro fue el detonante de las muestras de solidaridad; el obispo de Valle de Chalco y paisanos radicados en EE:UU les regalaron material

Jorge Martínez Cordero

    SAN MATEO HUILTZILZINGO, Méx.- La familia Rodríguez Martínez que perdió su humilde casa de piso de tierra y láminas en un incendio el uno de enero pasado, la  reconstruye con el apoyo y solidaridad de vecinos.

   El día de la tragedia, ocurrida en la colonia «Naranjo» de esta población perteneciente a Chalco, AMAQUEME realizó una transmisión en vivo para dar a conocer los hechos, la cual fue vista por miles de personas de la región oriente y aun de ciudades de Estados Unidos y a partir de ahí la ayuda comenzó a llegar.

Comida, despensa, ropa, calzado, cobijas y colchonetas, entre otros útiles artículos fueron entregados directamente a Heriberto y Adriana, padres de tres hijos, quienes trabajan como recolectores de basura para el gobierno local sin recibir sueldo o prestaciones laborales.

   Compañeros de trabajo de la familia fueron de los primeros en responder, presentándose al predio donde vivía la familia afectada con madera, polines y láminas para armar un cuarto provisional donde los cinco miembros de la familia actualmente viven.

Confundidos y desesperados, sin saber qué hacer, Heriberto y Adriana acudieron con Christian Castillo, sexto regidor de Chalco para exponer su situación y les proporcionó material para la construcción de una nueva casa.

Asimismo, la pareja informó que Fidel, un vecino de la comunidad que se encontraba en Chicago se enteró de la tragedia y a través de conocidos les envió 20 bultos de cemento.

Otro importante apoyo brindado fue el proporcionado por el párroco de esta comunidad, apellido Ardían, que también se reunió con ellos para informarles que el obispo de la Diócesis de Valle de Chalco, Víctor René Rodríguez Gómez les donaría varilla.

   Con dichas muestras de espontáneo desprendimiento, la esperanza volvió a la vida de los cinco miembros de la familia Rodríguez Martínez.

   Los trabajos para edificar su nuevo hogar comenzaron el lunes 13 de enero.

Cuando su nueva casa esté terminada y se les entregue, la familia planea invitar a todas las personas involucradas en su bienestar, agradeciendo su solidaridad y apoyo.

 «Estaremos eternamente agradecidos con Dios, con las buenas personas y con AMAQUEME por el invaluable trabajo realizado y por ser el detonante de todo lo bueno que está ocurriendo en nuestras vidas», externaron.

La reconstrucción de su vivienda no sólo significa el regreso a la normalidad, sino también un nuevo comienzo lleno de esperanza y gratitud.