fbpx
17 de mayo

Jorge Martínez Cordero

TENANGO DEL AIRE, Méx.- A consecuencia de rigurosos castigos impuestos a niños de cinco años del kínder Evangelina Ozuna Pérez, una menor se hizo del baño en sus ropas.

    Dejarlos sin recreo y prohibirles la salida del aula por cualquier motivo, incluso para ir al baño son de manera frecuente los correctivos aplicados a menores del tercero B, por su profesora María Guadalupe Muñoz García.

   Estas cotidianas prohibiciones provocaron que una de las alumnas, impedida para salir al baño no tuvo otra salida que hacer sus necesidades en sus ropas, permaneciendo así hasta la hora de salida.

   Los hechos sucedieron en el jardín de niños ubicado en la calle Censos Nacionales número 1 de esta cabecera la mañana del martes diez de octubre.

   Su madre Ángela Olalde Barbosa, descubrió que su niña estaba sucia cuando acudió a recogerla.

   Entrevistada por AMAQUEME, afirmó que debido al daño psicológico causado a su hija presentará una denuncia en contra de la profesora ante las instancias correspondientes.

   Asimismo, denunció la directora de la escuela, Vera Estela Galicia Hernández, no hizo nada después de quejarse en contra de María Guadalupe Muñoz García.

   Reveló que lo mismo pasó con Gregorio Arellano Reyes, supervisor de zona escolar, quien cuando habló con él le argumentó que por no tener más reportes o quejas en contra de la maestra Muñoz García no podía hacer nada, calificando lo sucedido a su hija como un incidente sin importancia.

Por la indiferencia de ambos, Ángela informó que denunciará los hechos ante la Secretaría de la Contraloría del Gobierno estatal y la Comisión de Derechos Humanos del estado de México.

   Asimismo, advirtió que pedirá la remoción de la maestra de su hija.

   Señaló que en el Centro Naranja de Atención a Mujeres, además de iniciar un expediente de hechos fue asesorada para proceder penalmente por actos de violencia infantil, ya que en este caso la profesora impidió a la menor satisfacer una necesidad de primera instancia.

Apuntó que lo último que el supervisor escolar de zona le dijo fue que por ser una falta administrativa la maestra sólo recibirá una llamada de atención.

Dijo que alzó la voz por su hija para que ningún otro menor le suceda lo mismo, pues aseguró que fue un acto de violencia, aunque tanto la directora como el supervisor aseguren que está exagerando y escandalizando por algo sin importancia.

Destacó que hace unos cinco años, varios padres de familia confrontaron a la misma directora por otras situaciones registradas en perjuicio de los niños, aseverando que no es la primera vez que suceden anomalías en el kínder, lo que ha ocasionado la gradual disminución de la matrícula de alumnos porque los papás se los llevan al kínder de Tepopula.

Enfatizó que hace responsable a la directora, al supervisor escolar y a la maestra de represalias en su contra o de su hija por denunciar los hechos públicamente.